Las cuatro nereidas que leve y graciosamente se cimbrean en su parte inferior, le imprimen una nota barroca muy peculiar. A muchos visitantes les extraña esta temática e incluso la ven poco apropiada para un lugar religioso. No podemos olvidar que la mitología pagana era un tema de moda en aquel siglo. En la mismísima Roma encontramos múltiples ejemplos.Accedamos al jardín, símbolo del Paraíso, en cuyo centro podemos admirar la hermosa fuente de las Nereidas, ideada por el P. Juan Vázquez, monje de esta Casa, de comienzos del siglo XVIII.